domingo, 30 de noviembre de 2014

DESAPEGO. 30 DE NOVIEMBRE. EL LENGUAJE DEL ADIÓS. CODEPENDENCIA

Un día, mi hijo trajo a casa a vivir con nosotros a un hámster. Lo pusimos en una jaula. Poco tiempo después, el hámster escapó.
Durante los siguientes seis meses, el animal corría asustado y salvaje por toda la casa. Y lo mismo nosotros para atraparlo.
“Ahí está. ¡Agárralo!”, gritábamos cada vez que alguien veía al hámster. Mi hijo o yo dejábamos lo que estuviéramos haciendo, corríamos por toda la casa y nos lanzábamos sobre el animal con la esperanza de atraparlo.
Me preocupaba por él, aunque no lo viéramos. “Esto no esta bien”, pensaba. “No puedo tener a un hámster corriendo suelto por la casa.
Tenemos que atraparlo. Tenemos que hacer algo”.
Un pequeño animal del tamaño de un ratón tenía en agitación toda la casa.
Un día, mientras estaba sentada en la sala, vi al animal correr por el pasillo. En estado de frenesí, empecé a abalanzarme sobre él, como generalmente lo hacía, y luego me detuve.
No, me dije. Estoy harta. Si ese animal quiere vivir en los rincones y escondrijos de esta casa, voy a dejar que lo haga. Estoy harta de preocuparme por él .Estoy harta de perseguirlo. Esta es una circunstancia irregular, pero así es justamente como va a tener que ser.
Dejé que el hámster corriera sin que yo reaccionara. Me sentía un poquito incómoda con mi nueva reacción -no reaccionar-, pero me ceñí a ella de todas maneras.
Me sentí más a gusto con mi nueva reacción, no reaccionar. Al poco tiempo, estaba perfectamente en paz con la situación. Había dejado de pelear con el hámster. Una tarde, unas cuantas semanas después de que empecé a practicar mi nueva actitud, el hámster corrió cerca de mí, como lo había hecho tantas veces y apenas lo mire. El animal se
paró en seco, volteó y me miró. Empecé a abalanzarme sobre él. Él empezó a correr. Me relajé.
“Muy bien”, dije. “Haz lo que quieras”. Y lo decía en serio.
Una hora después, el hámster vino, se paró junto a mí y esperó. Gentilmente lo levanté y lo coloqué en su jaula, donde ha vivido feliz desde entonces. ¿La moraleja de la historia? No te balances sobre el hámster. El ya está asustado, y tratar de atraparlo lo único que logra es asustarlo más y a nosotros nos vuelve locos.
El desapego funciona.


“Hoy me sentiré a gusto con mi nueva reacción de no reaccionar. Me sentiré en paz”.

sábado, 29 de noviembre de 2014

PASO DOCE. 29 DE NOVIEMBRE. EL LENGUAJE DEL ADIÓS. CODEPENDENCIA

El Paso Doce dice que habiendo obtenido un despertar espiritual, tratemos de llevar este mensaje a los demás. Nuestro mensaje es de esperanza, de amor, de consuelo, de salud, un modo de vida mejor, que funciona.
¿Cómo lo llevamos? No rescatando. No controlando. No obsesionándonos. No volviéndonos evangelistas de la causa de la recuperación. Llevamos este mensaje de maneras pequeñas, sutiles pero poderosas. Hacemos nuestro propio trabajo de recuperación y nos convertimos en una demostración viviente de esperanza, de amor a si mismo, de consuelo y de salud. Estas calladas conductas pueden ser un poderoso mensaje.
Invitar no ordenar ni exigir a alguien a que acuda a una reunión es una manera poderosa de llevar el mensaje.
Asistir a nuestras reuniones y compartir con los demás como nos funciona a nosotros la recuperación es una forma poderosa de llevar el mensaje. Con frecuencia, nos descubrimos a nosotros mismos llevando el mensaje en forma mas efectiva que cuando nos disponemos a reformar, a convencer o a obligar a alguien a que entre en recuperación.
Cuidar como nanas a los demás y controlar no son formas de llevar el mensaje. Lo único que acarrean esas conductas es codependencia.
Y empero, la forma más poderosa de ayuda a los demás consiste en ayudarnos a nosotros mismos. Cuando hacemos nuestro propio trabajo y somos honestos y abiertos acerca de ello impactamos más a los demás que con nuestro gesto “ayudador”, más bien intencionado. No podemos cambiar a los demás, pero cuando nos cambiamos nosotros mismos, podemos terminar cambiando al mundo.


“Hoy me esforzaré en llevar el mensaje de maneras que funcionen. Dejaré ir mi necesidad de “ayudar” a la gente. En vez de ello, me concentraré en ayudarme y cambiarme a mí mismo. Si me viene una oportunidad para compartir mi recuperación con alguien, lo haré tranquilamente. Dios mío, ayúdame a demostrarle a los demás consuelo, fuerza y esperanza. Podré ser un canal para ayudar a los demás cuando esté listo. Esto no tengo que forzarlo; ocurrirá de manera natural”.

viernes, 28 de noviembre de 2014

DE VUELTA A LOS PASOS. 28 DE NOVIEMBRE. EL LENGUAJE DEL ADIÓS. CODEPENDENCIA

Regresa a los Pasos. Vuelve a un Paso.
 Cuando no sepamos qué hacer a continuación, cuando nos sintamos confundidos, inquietos, perturbados, en las últimas, abrumados, completamente involuntariosos, llenos de rabia o de desesperación, volvamos a los Pasos.
No importa qué situación estemos enfrentando, trabajar un Paso nos ayudará. Concéntrate en uno, confía en tus instintos y trabájalo.
¿Qué significa trabajar un Paso? Piensa en ello. Medita sobre ello.
En vez de concentrarte en la confusión, en los problemas o en las situación que provoca tu desesperación o tu rabia, concéntrate en el Paso.
Piensa en cómo se podría aplicar ese Paso. Cíñete a él. Aférrate a él con tantas ganas como nos aferramos a nuestra confusión o al problema.
Los Pasos son una solución. Funcionan. Podemos confiar en que funcionan. Podemos confiar en el lugar a donde los Pasos nos conducirán.
Cuando no sepamos qué paso dar después, tomemos uno de los Doce.


“Hoy me concentraré en usar los Doce Pasos para resolver problemas y para mantenerme en equilibrio y en armonía. Trabajaré un paso al máximo de mi capacidad. Aprenderé a confiar en los Pasos y me apoyaré en ellos en vez de en mis conductas protectoras, codependientes”.

jueves, 27 de noviembre de 2014

PODEMOS CONFIAR EN NOSOTROS MISMOS. 27 DE NOVIEMBRE. EL LENGUAJE DEL ADIÓS. CODEPENDENCIA

Para muchos de nosotros, la cuestión no es si podemos o no confiar de nuevo en otra persona; es si podemos o no volver a confiar en nuestro propio juicio.
“El ultimo error que cometí casi me cuesta mi cordura”, dijo una mujer en recuperación que se caso con un adicto sexual. “No me puedo dar el lujo de cometer otro error como ese”.
Muchos de nosotros hemos confiado en gente que siguió engañándonos, abusando de nosotros o explotándonos de alguna manera porque confiamos en ella. Podemos haber encontrado a esa gente encantadora, amable, decente. Pudo haber habido una vocecita que dijera, “No, algo esta mal”. O podemos habernos sentido a gusto confiando en esa persona, y en estado de shock cuando descubrimos que nuestros instintos estaban equivocados.
El asunto entonces puede reverberar en nuestra vida durante años. Nuestra confianza en los demás puede haberse sacudido, pero nuestra confianza en nosotros mismos puede haberse destrozado peor.
¿Cómo algo puede sentirse tan correcto, fluir tan bien y ser un error tan total? Podemos preguntarnos, ¿cómo podré volver a confiar en mi proceso de selección cuando me demostró ser tan defectuoso?.
Podemos no tener nunca la respuesta. Yo creo que necesité cometer ciertos “errores” para aprender lecciones de crítica importancia que no estoy segura que hubiera aprendido de alguna otra manera. No podemos dejar que nuestro pasado interfiera con nuestra capacidad para confiar en nosotros mismos. No podemos darnos el lujo de funcionar con miedo.
Si siempre estamos tomando la decisión equivocada en los negocios o en el amor, puede ser que necesitemos aprender por qué insistimos en derrotarnos a nosotros mismos.
Pero la mayoría de nosotros mejora. Aprendemos. Crecemos a partir de nuestros errores. Lentamente, por incrementos, mejoran nuestras relaciones. Mejoran nuestras alternativas de trabajo. Mejoran nuestras decisiones acerca de cómo manejar situaciones con los amigos o con los hijos. Nos beneficiamos de nuestros errores. Nos beneficiamos de nuestro pasado. Y si hemos cometido errores, tuvimos necesidad de cometerlos para aprender en el camino.


“Hoy dejaré ir mis miedos acerca de confiar en mí mismo porque he cometido errores en el pasado. Comprendo que estos miedos sólo sirven para deteriorar mi buen juicio hoy. Le daré validez a mi pasado, e incluso a mis errores, aceptándolos y sintiendo gratitud por todo ello. Me esforzaré en ver lo que he ganado de mis errores. Trataré también de ver mis buenas decisiones. Tendré puesta la mirada vigilante sobre el progreso general en mi vida”.

miércoles, 26 de noviembre de 2014

DEJEMOS IR LA AUTOCRÍTICA. 26 DE NOVIEMBRE. EL LENGUAJE DEL ADIÓS. CODEPENDENCIA

¡Miren qué lejos hemos llegado!
Está bien concentrarnos en la tarea que sigue, en lo que falta por hacer. También es importante detenernos y sentirnos complacidos por lo que ya hemos terminado.
Si, puede parecer que el cambio ha sido lento. A veces, el tiempo es agotador. Sí, hemos dado pasos hacia atrás. Pero estamos justo donde se supone que debemos estar. Estamos justo donde necesitamos estar.
Y hemos llegado hasta aquí de lejos.
A veces a brincos, a veces con pasos diminutos, a veces pataleando y gritando todo el tiempo, a veces con las mangas remangadas y con los nudillos en blanco, hemos aprendido. Hemos crecido. Hemos cambiado. Miren qué lejos hemos llegado.


“Hoy apreciaré mi progreso. Me permitiré sentirme bien acerca de lo que he logrado”.

martes, 25 de noviembre de 2014

TOMA DE CONCIENCIA. 25 DE NOVIEMBRE. EL LENGUAJE DEL ADIÓS. CODEPENDENCIA

Cuando acabamos de hacernos conscientes de un problema, de una situación o de un sentimiento, podemos reaccionar con ansiedad o con miedo. No hay necesidad de temer a la conciencia. No hay necesidad.
La toma de conciencia es el primer paso hacia el cambio positivo y el crecimiento interior. Es el primer paso hacia la solución del problema, o de la satisfacción de la necesidad, el primer paso hacia el futuro. Así es como nos concentramos en la siguiente lección.
La toma de conciencia es la forma como la vida, el universo y nuestro Poder Superior captan nuestra atención y nos preparan para el cambio. El proceso de ser cambiados empieza con la toma de conciencia. La toma de conciencia, la aceptación y el cambio, ése es el ciclo. Podemos aceptar la incomodidad temporal de la toma de conciencia porque podemos confiar en Dios y en nosotros mismos.


“Hoy estaré agradecido por cualquier toma de conciencia que me venga. Desplegaré gratitud, paz y dignidad cuando la vida capte mi atención. Recordaré que está bien aceptar la incomodidad temporal de la toma de conciencia porque puedo confiar en que ésta es mi Poder Superior que me está llevado hacia delante”.

lunes, 24 de noviembre de 2014

SOMETIMIENTO. 24 DE NOVIEMBRE. EL LENGUAJE DEL ADIÓS. CDEPENDENCIA

Sometimiento significa decir: “Está bien, Dios. Haré lo que Tú quieras”.

La fe en el Dios de nuestra recuperación significa que confiemos en que, eventualmente, nos gustará hacer eso.


“Hoy me someteré a mi Poder Superior. Confiaré en que el plan de Dios para mí será bueno, aunque sea diferente del que yo esperaba o del que tenía esperanzas”.

domingo, 23 de noviembre de 2014

SEXUALIDAD SANA. 23 DE NOVIEMBRE. EL LENGUAJE DEL ADIÓS. CODEPENDENCIA

Muchas áreas de nuestra vida necesitan curación.
Una parte importante de nuestra vida es nuestra sexualidad. Nuestros sentimientos y creencias acerca de nuestra sexualidad, nuestra capacidad para fomentar, para apreciar y para disfrutar nuestra sexualidad, nuestra capacidad para respetarnos a nosotros mismos sexualmente, nuestra capacidad para dejar ir la vergüenza y la confusión en cuanto al sexo, todo ello puede estar deteriorado o confuso por nuestra codependencia.
Nuestra energía sexual puede estar bloqueada. O, para algunos de nosotros, el sexo puede ser la única forma como aprendimos a conectarnos con la gente. Nuestra sexualidad puede no estar conectada al resto de nosotros; el sexo puede no estar conectado al amor, por nosotros mismos o por los demás.
Algunos de nosotros sufrimos abuso sexual cuando niños o pudimos habernos involucrado en conductas sexualmente adictivas, conductas sexuales compulsivas que se salieron fuera de control y produjeron vergüenza.
Algunos de nosotros pudimos habernos involucrado en la codependencia sexual: no prestándole atención a lo que queríamos, o no queríamos, sexualmente; permitiéndonos involucrarnos sexualmente porque eso era lo que la otra persona quería; cerrando nuestra sexualidad junto con nuestros demás sentimientos; negándonos a nosotros mismos disfrutar sanamente como seres sexuales.
Nuestra sexualidad es una parte de nosotros mismos que merece atención y energía curativas. Es una parte de nosotros que podemos permitir que se conecte a nuestro ser completo; es una parte de nosotros de la que podemos dejar de sentirnos avergonzados.
Esta bien y es sano permitir que se abra nuestra energía sexual y que se cure. Esta conectada a nuestra creatividad y a nuestro corazón. No tenemos por que permitir que nuestra energía sexual nos controle a nosotros o a nuestras relaciones. Podemos establecer y mantener limites sanos, adecuados, acerca de nuestra sexualidad. Podemos descubrir que significa esto en nuestra vida.
Podemos disfrutar el regalo de ser seres humanos a quien se les ha dado el don de la energía sexual, sin abusar de ese don ni menospreciarlo.


“Hoy empezaré a integrar mi sexualidad al resto de mi personalidad. Dios mio, ayúdame a dejar ir mis miedos y mi vergüenza acerca de mi sexualidad. Enséñame las cuestiones que necesito encontrar acerca de mi sexualidad. Ayúdame a abrirme a la curación en esa área de mi vida”.

sábado, 22 de noviembre de 2014

LA MAGIA DE LA GRATITUD Y LA ACEPTACIÓN. 22 DE NOVIEMBRE. EL LENGUAJE DEL ADIÓS. CODEPENDENCIA

La gratitud y la aceptación son dos trucos mágicos de los que disponemos los que estamos en recuperación. No importa quiénes seamos, dónde estemos o qué tengamos, la gratitud y la aceptación funcionan.
Eventualmente podemos sentirnos tan felices que nos demos cuenta de que nuestras circunstancias actuales son buenas. O que dominemos nuestras circunstancias y luego sigamos con la siguiente serie de circunstancias.
Si nos quedamos atascados, o nos sentimos desgraciados, atrapados y desesperanzados, probemos la gratitud y la aceptación.
Si hemos tratado sin éxito de alterar nuestras circunstancias actuales y nos hemos empezado a sentir como si nos estuviéramos pegando la cabeza contra una pared de ladrillo, probemos la gratitud y la aceptación.
Si sentimos que todo está oscuro y que la noche nunca terminará, probemos la gratitud y la aceptación.
Cuando falle todo lo demás, regresa a lo básico. La gratitud y la aceptación funcionan.


“Hoy, Dios mío, ayúdame a dejar ir mi resistencia. Ayúdame a saber que el dolor de una circunstancia dejará de dolerme tanto si la acepto. Practicaré lo básico de la gratitud y de la aceptación en mi vida y en todas mis circunstancias actuales”.

viernes, 21 de noviembre de 2014

MIEDOS FINANCIEROS. 21 DE NOVIEMBRE. EL LENGUAJE DEL ADIÓS. CODEPENDENCIA

Me senté en el coche, viendo el letrero en la puerta de la oficina de víveres: “Cerrado hasta el viernes”. Era miércoles. Tenía dos hijos hambrientos y, yo misma, no tenía dinero.
Apoyé la cabeza sobre el volante. Ya no aguantaba más.
Había sido tan fuerte, tan valiente, tan confiada durante tanto tiempo. Era una madre soltera con dos hijos, recién divorciada.
Había trabajado tan valerosamente por sentirme agradecida de lo que tenía, al tiempo que fijaba metas económicas y trabajaba en creer que merecía lo mejor.
Había soportado tanta pobreza, tanta privación. Diariamente trabajaba el Paso Once. Trabajaba duro rezando para que Dios me diera a conocer Su voluntad sólo para mí y para que me diera la fuerza para cumplirla. Creía que estaba haciendo lo que necesitaba hacer en mi vida. No estaba payaseando. Estaba haciendo mi mejor esfuerzo, estaba trabajando lo más que podía.
Y simplemente no había suficiente dinero. La vida había sido una lucha en muchos sentidos, pero la lucha con el dinero parecía no tener fin.
El dinero no lo es todo, pero se necesita para resolver ciertos problemas. Estaba harta de “dejar ir” y “dejar ir” y “dejar ir”. Estaba harta de “actuar como si” tuviera suficiente dinero. Estaba cansada de tener que trabajar tan arduamente a diario por dejar ir el dolor y el miedo de no tener lo suficiente. Estaba cansada de trabajar tan duro por ser feliz sin tener lo suficiente. De hecho, la mayor parte del tiempo estaba feliz. Había encontrado mi alma en la pobreza. Pero ahora que ya tenía a mi alma y a mi ser, quería también algo de dinero.
Mientras estaba en el coche tratando de recomponerme, escuché a Dios hablar con esa silenciosa, calmada voz que murmura suavemente a nuestras almas.
“No tienes que volver a preocuparte por dinero, criatura. No a menos que así lo quieras. Te dije que yo cuidaría de ti. Y lo haré.”
Magnífico, pensé. Muchísimas gracias. Te creo. Confío en Ti. Pero mírame. No tengo dinero. No tengo comida. Y la oficina de víveres (la oficina gubernamental encargada de proveer de comida a la gente sin empleo en Estados Unidos) está cerrada. Me has fallado.
De nuevo escuche su voz en mi alma: “No tienes que volver a preocuparte por dinero. No tienes por que volver a tener miedo. Te prometí que cubriría todas tus necesidades”.
Me fui a casa, le llame a una amiga y le pedí algo de dinero prestado. Detestaba pedir prestado, pero no tenia alternativa. Mi derrumbamiento en el coche había sido un alivio, pero no resolvió nada, ese día. No había ningún cheque en el buzón.
Pero conseguí comida para ese día. Y para el día siguiente. Y el siguiente. A los seis meses, mis ingresos se habían duplicado. A los nueve meses, se habían triplicado. Desde ese día, he tenido épocas difíciles, pero nunca me la he tenido que pasar sin nada, no mas que por un momento.
Ahora tengo suficiente. A veces aun me preocupo por mi dinero porque me parece tan habitual. Pero ahora no tengo por qué hacerlo, y sé que nunca tuve que hacerlo.


“Dios mío, ayúdame a trabajar duro por lo que creo que está bien para mí en mi vida hoy, y confiaré en Ti para el resto. Ayúdame a dejar ir mis miedos acerca del dinero. Ayúdame a darte a Ti esa parte, Dios mío. Quita los obstáculos y las barreras en mi vida para el éxito económico”.

jueves, 20 de noviembre de 2014

DESEOS Y NECESIDADES. 20 DE NOVIEMBRE. EL LENGUAJE DEL ADIÓS.

A muchos de nosotros nos han lavado el cerebro para pensar que no podemos tener lo que queremos en la vida.Esa es la creencia del mártir. Nace de la privación y del miedo.
Identificar lo que queremos y necesitamos, y escribirlo luego, pone en movimiento una poderosa cadena de eventos. Indica que estamos asumiendo la responsabilidad de nosotros mismos, que le estamos dando permiso a Dios y al universo para proveer nuestros deseos y necesidades.
La creencia de que merecemos tener un cambio en el carácter, en una relación, una nueva dimensión en una relación que ya existe, una posesión, cierto nivel de salud, de vida, de amor o de éxito, es una fuerza poderosa para que suceda eso que deseamos.
Frecuentemente, cuando nos damos cuenta de que queremos algo, ¡ese sentimiento es Dios que nos está preparando para recibirlo! Escucha. Confía. Dale poder a lo bueno en tu vida prestando atención a lo que quieres y necesitas. Escríbelo. Afírmalo mentalmente. Reza por ello. Luego, déjalo ir. Dáselo a Dios y ve qué sucede. Los resultados pueden ser mejores de lo que pensabas.


“Hoy prestaré atención a lo que quiero y necesito. Me daré tiempo para escribirlo, y luego lo dejaré ir. Empezaré a creer que merezco lo mejor”.

miércoles, 19 de noviembre de 2014

ACEPTEMOS NUESTROS SENTIMIENTOS. 19 DE NOVIEMBRE. EL LENGUAJE DEL AADIÓS. CODEPENDENCIA

¿Por qué batallamos tanto con nuestros sentimientos? ¿Por qué trabajamos tan duro por negar nuestras emociones, especialmente en relación con otras personas? ¡Son sólo sentimientos!
En el curso de un día…
 Podemos negar que nos sentimos frustrados en reacción a alguien que nos está vendiendo un servicio.
Podemos negar que nos sentimos frustrados, enojados o heridos en reacción a un amigo.
Podemos negar sentimientos de miedo o de enojo hacia nuestros hijos.
Podemos negar toda una gama de sentimientos acerca de nuestro cónyuge o de la persona con quien tenemos una relación amorosa.
Podemos negar sentimientos provocados por la gente para la cual trabajamos o por la gente que trabaja para nosotros.
Algunas veces, los sentimientos son una reacción directa hacia los demás; otras, la gente dispara en nuestro interior algo más profundo, una vieja tristeza o frustración.
Haciendo caso omiso del origen de nuestros sentimientos, siguen siendo nuestros sentimientos. Son nuestros. Y la aceptación a menudo es lo único que se necesita para hacer que se vayan.
No tenemos por qué dejar que nuestros sentimientos controlen nuestra conducta. No tenemos por qué actuar de acuerdo con cada sentimiento que experimentemos. No necesitamos dar rienda suelta a una conducta inadecuada.
Ayuda hablar acerca de nuestros sentimientos con alguien en quien confiemos. A veces necesitamos exponerle nuestros sentimientos a la persona que los esta provocando. Esto puede fomentar la intimidad y la cercanía. Pero la persona mas importante a la que necesitamos decírselo es a nosotros mismos. Si nos permitimos experimentar nuestros sentimientos, aceptarlos y liberarlos, sabremos que hacer a continuación.


“Hoy recordaré que los sentimientos son una parte importante de mu vida. Estaré abierto a mis sentimientos en mi vida familiar, en mis amistades, en el amor y en el trabajo. Experimentare mis sentimientos sin juzgarme a mi mismo”.

martes, 18 de noviembre de 2014

PERMITAMOS QUE NOS CONSIENTAN. 18 DE NOVIEMBRE. EL LENGUAJE DEL ADIÓS. CODEPENDENCIA

¿Por qué batallamos tanto con nuestros sentimientos? ¿Por qué trabajamos tan duro por negar nuestras emociones, especialmente en relación con otras personas? ¡Son sólo sentimientos!
En el curso de un día…
 Podemos negar que nos sentimos frustrados en reacción a alguien que nos está vendiendo un servicio.
Podemos negar que nos sentimos frustrados, enojados o heridos en reacción a un amigo.
Podemos negar sentimientos de miedo o de enojo hacia nuestros hijos.
Podemos negar toda una gama de sentimientos acerca de nuestro cónyuge o de la persona con quien tenemos una relación amorosa.
Podemos negar sentimientos provocados por la gente para la cual trabajamos o por la gente que trabaja para nosotros.
Algunas veces, los sentimientos son una reacción directa hacia los demás; otras, la gente dispara en nuestro interior algo más profundo, una vieja tristeza o frustración.
Haciendo caso omiso del origen de nuestros sentimientos, siguen siendo nuestros sentimientos. Son nuestros. Y la aceptación a menudo es lo único que se necesita para hacer que se vayan.
No tenemos por qué dejar que nuestros sentimientos controlen nuestra conducta. No tenemos por qué actuar de acuerdo con cada sentimiento que experimentemos. No necesitamos dar rienda suelta a una conducta inadecuada.
Ayuda hablar acerca de nuestros sentimientos con alguien en quien confiemos. A veces necesitamos exponerle nuestros sentimientos a la persona que los esta provocando. Esto puede fomentar la intimidad y la cercanía. Pero la persona mas importante a la que necesitamos decírselo es a nosotros mismos. Si nos permitimos experimentar nuestros sentimientos, aceptarlos y liberarlos, sabremos que hacer a continuación.


“Hoy recordaré que los sentimientos son una parte importante de mu vida. Estaré abierto a mis sentimientos en mi vida familiar, en mis amistades, en el amor y en el trabajo. Experimentare mis sentimientos sin juzgarme a mi mismo”.

lunes, 17 de noviembre de 2014

PENA Y ACCIÓN. 17 DE NOVIEMBRE. EL LENGUAJE DEL ADIÓS. CODEPENDIENTES

Confía en Dios y haz algo. (Mary Lyon).

Es importante que nos permitamos experimentar la pena como un pasaje entre el ayer y el mañana. Pero no tenemos por qué dejarnos controlar indebidamente por nuestra pena o nuestro dolor.
Hay épocas en las que hemos experimentado pena, en que nos hemos sometido a la pesadez, al cansancio y a lo fastidioso de una circunstancia por un tiempo suficiente. Ya es tiempo de romper con eso. Ya es tiempo de emprender una acción.
Nosotros sabremos cuando sea tiempo de romper con la rutina de experimentar la pena. Habrá señales dentro de nosotros y a nuestro alrededor. Nos cansaremos de la pesadez. Se nos ocurrirá una idea; se nos presentara una oportunidad. Podremos pensar: no. Es demasiado esfuerzo. Hazlo de todos modos. Prueba algo. Busca algo. Estírate. Haz algo desusado, algo diferente, algo especial.
Una nueva actividad puede ayudar a disparar el proceso de transformación. ¡Quédate despierto dos horas mas de lo acostumbrado! Haz una cita para hacer algo por ti mismo que sea diferente a lo que normalmente haces. Visita a alguien que no hayas visto desde hace años. Haz algo que aliente y ayude a la nueva energía a que venga hacia ti.
Podemos no sentir ganas de romper con la pena, el duelo. Podrá parecernos mas seguro, mas fácil, permanecer en nuestro capullo. Empieza a tratar de romperlo de todas maneras.
Prueba las paredes de tu capullo. Empújalas. Empújalas un poco más. Puede ser tiempo ya de salir.


“Hoy confiaré en Dios y en mi proceso, pero también tomaré acción para ayudarme a sentirme mejor”.

domingo, 16 de noviembre de 2014

LA TRAMPA DE LA VÍCTIMA. 16 DE NOVIEMBRE. EL LENGUAJE DEL ADIÓS. CODEPENDIENTES

La creencia de que la vida tiene que ser dura y difícil es la creencia de un mártir.
Nosotros podemos cambiar nuestras creencias negativas acerca de la vida y acerca de que podemos tener la fuerza para detener nuestro dolor y cuidar de nosotros mismos.
No somos impotentes. Podemos resolver nuestros problemas. Tenemos poder, no para cambiar o controlar a los demás, sino para solucionar los problemas que nos toca resolver.
Utilizar cada problema que nos viene para “probar” que la vida es dura y que somos impotentes, esto es codependencia. Es la trampa de la víctima.
La vida no tiene que ser difícil. De hecho, puede ser suave. La vida es buena. No tenemos que “horrorizarla”, ni horrorizarnos nosotros mismos. No tenemos que vivir en el sótano. Tenemos poder, más poder del que sabemos, incluso en los tiempos difíciles. Y las épocas difíciles no prueban que la vida es mala; son parte de los altibajos de la vida; a menudo se resuelven para bien.
Podemos cambiar nuestra actitud; podemos cambiar nosotros mismos; a veces podemos cambiar nuestras circunstancias.
La vida es desafiante. Algunas veces hay más dolor del que pensábamos; otras, más alegría de la que imaginábamos.
Todo es parte del paquete, y el paquete es bueno.
No somos victimas de la vida. Podemos aprender a dejar de ser víctimas de la vida. Al dejar ir nuestra creencia de que la vida tienen que ser dura y difícil, hacemos nuestra vida más fácil.


“Hoy, Dios mío, ayúdame a dejar ir mi creencia de que la vida es tan difícil, tan espantosa o tan difícil. Ayúdame a reemplazar esa creencia con un punto de vista más sano, más realista”.

sábado, 15 de noviembre de 2014

BENEFICIOS DE LA RECUPERACIÓN. 15 DE NOVIEMBRE. EL LENGUAJE DEL ADIÓS. CODEPENDENCIA

Hay dos tipos de beneficios de la recuperación; ganancias a corto y a largo plazo.
Las ganancias a corto plazo son las cosas que podemos hacer hoy que nos ayudan a sentirnos bien inmediatamente.
Podemos levantarnos por la mañana, leer unos cuantos minutos nuestro libro de meditaciones y sentir que nos levanta el ánimo. Podemos trabajar un Paso y percatarnos de inmediato del cambio que experimentamos en cuanto a cómo nos sentimos y funcionamos. Podemos asistir a una reunión y sentirnos refrescados, hablar con un amigo y sentirnos consolados o practicar una nueva conducta de recuperación, tal como lidiar con nuestros sentimientos o hacer algo bueno por nosotros mismos y sentirnos aliviados.
Sin embargo, hay otros beneficios de la recuperación que no vemos inmediatamente de un día para otro o incluso en varios meses. Esas son las ganancias a largo plazo, el proceso más grande que hacemos en nuestra vida.
Con el paso de años podemos ver magnificas recompensas. Podremos ver como hemos crecido en la fe hasta que tengamos hasta que tengamos una relación personal cotidiana con un Poder Superior que es tan real para nosotros como la relación con el mejor amigo o amiga.
Podemos ver como nos hacemos mas bellos a medida que nos deshacemos de la vergüenza, de la culpa, de los resentimientos, del odio a nosotros mismos y de otras características negativas de nuestro pasado.
Podemos ver como se mejora la calidad de nuestras relaciones con la familia, los amigos y los cónyuges. Descubrimos que nuestra capacidad para la intimidad y la cercanía, para dar y recibir, va creciendo constante y gradualmente.
Podemos vernos crecer en nuestras carreras, en nuestra capacidad para ser gente creativa, poderosa, productiva, usando nuestros dones y talentos de una manera que nos hace sentir bien y benefician a los
demás.
Descubrimos la alegría y la belleza en nosotros mismos, en los demás y en la vida.
El progreso a largo plazo es constante, pero a veces lento, dándose en incrementos y a menudo con muchos pasos para adelante y para atrás. La practica constante de conducta de recuperación y de apilar ganancias a corto plazo conduce a recompensas a largo plazo.


“Hoy estaré agradecido por las recompensas inmediatas y a largo plazo de la recuperación. Si soy nuevo en la recuperación, tendré fe en que puedo lograr beneficios a largo plazo. Si ya llevo un tiempo en recuperación, haré una pausa para reflexionar y sentir gratitud por mi progreso general”.

viernes, 14 de noviembre de 2014

DEJEMOS SALIR NUESTRA IRA. 14 DE NOVIEMBRE. EL LENGUAJE DEL ADIÓS. CODEPENDENCIA

Está bien estar enojados, pero no es sano estar resentidos. Haciendo caso omiso a lo que hayamos aprendido cuando niños, sin importar los ejemplos que hayamos tenido, podemos aprender a lidiar con nuestra ira de maneras sanas para nosotros y para los que nos rodean.
Podemos tener nuestros sentimientos de enojo. Podemos ponernos en contacto con ellos, apropiarnos de ellos, sentirlos, expresarlos, liberarlos y acabar con ellos.
Podemos aprender a escuchar lo que nos está diciendo la ira acerca de lo que queremos y necesitamos para poder cuidar de nosotros mismos.
A veces, incluso podemos dar rienda suelta a sentimientos de enojo que no están justificados. Los sentimientos son sólo sentimientos; no hay moralidad en el sentimiento, únicamente en nuestra conducta.
Podemos sentirnos enojados sin lastimar o abusar de los demás ni de nosotros mismos.
Podemos aprender a lidiar con la ira de maneras que beneficien nuestras relaciones en vez de que las perjudiquen.
Si no sentimos hoy nuestros sentimientos de enojo, necesitaremos enfrentarlos mañana.


“Hoy me dejaré sentir mi enojo. Expresaré mi ira adecuadamente, sin sentimientos de culpa. Luego, habré terminado con ella”.

jueves, 13 de noviembre de 2014

CUIDEMOS DE NOSOTROS MISMOS. 13 DE NOVIEMBRE. EL LENGUAJE DEL ADIÓS. CODEPENDENCIA

No tenemos que esperar a que los demás vengan en nuestra ayuda. No somos víctimas. No estamos desamparados.
Dejar ir los pensamientos equivocados significa que debemos darnos cuenta de que no hay caballeros de caballo blanco, ni abuelas mágicas mirándonos desde el cielo, esperando a rescatarnos.
Nos podrán llegar maestros, pero no nos rescatarán. Nos enseñaran.
Vendrá gente que se interese por nosotros, pero no nos rescatará. Se preocupará por nosotros.
Vendrá la ayuda, pero la ayuda no rescata. Nosotros somos nuestros propios rescatadores.
Nuestras relaciones mejorarán dramáticamente cuando dejemos de rescatar a los demás y dejemos de esperar que nos rescaten.


“Hoy dejaré ir los miedos y las dudas acerca de mí mismo que me impiden tomar una acción asertiva de acuerdo con lo que mejor me conviene. Yo puedo cuidar de mí mismo y dejar que los otros hagan lo mismo por ellos mismos”.

miércoles, 12 de noviembre de 2014

EL MOMENTO PRECISO. 12 DE NOVIEMBRE. EL LENGUAJE DEL ADIÓS. CODEPENDENCIA

Espera hasta que sea el momento. Es contraproducente posponer o diferir las cosas; también es contraproducente actuar demasiado pronto, antes de que haya llegado el momento.
A veces nos llenamos de pánico y emprendemos una acción por miedo. A veces emprendemos una acción fuera de tiempo por venganza o porque queremos castigar a alguien. Actuamos o hablamos demasiado pronto a modo de controlar o de forzar a alguien a la acción. A veces emprendemos una acción demasiado pronto para aliviar sentimientos de incomodidad o de ansiedad acerca de como resultara una situación.
Una acción que se emprenda demasiado pronto puede ser tan ineficaz como otra que se emprenda demasiado tarde. Puede salirnos el tiro por la culata y provocar mas problemas de los que resuelva. Por lo general, si esperamos hasta que sea el momento preciso -a veces tan solo cuestión de minutos o de horas- la incomodidad se disipa y se nos da la fuerza para cumplir lo que necesitábamos hacer.
En la recuperación estamos aprendiendo a ser eficaces.
Nuestras respuestas vendrán. Nuestra guía vendrá, Reza. Confía. Espera. Deja ir. Se nos esta conduciendo. Se nos esta guiando.


“Hoy dejare ir mi necesidad de controlar esperando hasta que sea el momento preciso. Cuando así sea, emprenderé la acción”.

martes, 11 de noviembre de 2014

DISCIPLINA. 11 DE NOVIEMBRE. EL LENGUAJE DEL ADIÓS. CODEPENDENCIA

Los niños necesitan disciplina para sentirse seguros; igual los adultos.
Disciplina significa comprender que hay consecuencias lógicas para nuestra conducta. Disciplina significa asumir la responsabilidad por nuestra conducta y las consecuencias. Disciplina significa aprender a esperar lo que queremos. Disciplina significa estar dispuestos a trabajar por lo que queremos. Disciplina significa aprender y practicar nuevas conductas.
Disciplina significa estar donde necesitamos estar, cuando necesitamos estar, a pesar de nuestros sentimientos.
Disciplina es el desempeño cotidiano de tareas, sean éstas conductas de recuperación o lavar los platos.
La disciplina implica confiar en que alcanzaremos nuestras metas aunque no podamos verlas.
La disciplina puede ser agotadora. Podemos sentirnos asustados, confundidos, inseguros. Más tarde, veremos el propósito. Pero esta claridad de visión generalmente no viene durante la época de disciplina. Podemos no creer incluso que estamos yendo adelante. Pero estamos. La tarea en épocas de disciplina es sencilla: escuchar, confiar y obedecer.


“Poder Superior, ayúdame a aprender a someterme a la disciplina. Ayúdame a estar agradecido porque Tú te preocupes por mí lo suficiente para permitir estas épocas de disciplina y de aprendizaje en mi vida. Ayúdame a saber que como resultado de la disciplina y del aprendizaje, algo importante se habrá resuelto en mi interior”.

lunes, 10 de noviembre de 2014

CREENCIAS ACERCA DEL DINERO. 10 DE NOVIEMBRE. EL LENGUAJE DEL ADIÓS. CODEPENDENCIA.

Estaba empezando en un empleo nuevo dentro de una corporación. Yo era eficiente en mi actividad. El gerente de personal y yo estábamos hablando de los detalles de la contratación y él me preguntó cuánto creía que merecía ganar. Lo pensé y le dije que 400 dólares al mes. Esto era en los años sesenta. No quería pedir demasiado, de modo que decidí pedir la mínima cantidad con la que pudiera vivir. Me contrató y me dio lo que le había pedido. Tiempo después, cuando dejé ese trabajo, el gerente de personal me dijo que había estado dispuesto a pagarme lo que yo hubiera querido. Si le hubiera pedido 600 o hasta 700 dólares mensuales, que era un sueldo magnifico en esa época, me los hubiera dado. Me había limitado a mi mismo por lo que creía que merecía. (Anónimo).

¿Cuales son nuestras creencias acerca del dinero?¿Creemos que el dinero es malo o que esta mal tenerlo?
Ninguna de las dos cosas. Es un articulo en la tierra, una necesidad. Es lo que la gente necesita para pagar muchas de sus necesidades básicas, así como lujos y gustos; es una de las maneras como se les recompensa por su trabajo. Sin embargo, amar el dinero puede ser tan contraproducente como amar a cualquier otro articulo. Nos podemos obsesionar con el dinero; lo podemos usar como un escape de las relaciones y de los sentimientos; lo podemos usar en forma compulsiva para ganar una sensación temporal de poder.
El dinero es simplemente dinero.
¿Creemos que hay escasez de dinero?
Muchos de nosotros crecimos con un pensamiento de privación en lo concerniente al dinero: no hay suficiente. Nunca habrá suficiente. Si obtenemos un poco, podemos guardarlo y atesorarlo porque ya no hay más.
El dinero no está escaso. No tenemos por qué desperdiciar nuestra energía guardando resentimiento hacia aquellos que tienen suficiente. Hay mucho dinero aquí en la Tierra.
¿Cuánto creemos merecer?
Muchos de nosotros nos estamos limitando a nosotros mismos por lo que creemos merecer.
El dinero no es malo. No hay escasez, excepto en nuestra mente y en nuestras actitudes. Y lo que creamos merecer, eso será lo que recibamos.
Podemos cambiar nuestras creencias por medio de afirmaciones, fijando metas, empezando por donde estamos y trabajando para llegar lentamente a donde queremos estar.


“Hoy examinaré mis creencias acerca del dinero. Empezaré el proceso de dejar ir cualquier creencia autoderrotista que pueda estar limitando u obstaculizando la parte económica de mi vida”.

domingo, 9 de noviembre de 2014

ACEPTAMOS AMOR. 9 DE NOVIEMBRE. EL LENGUAJE DEL ADIÓS, CODEPENDENCIA

Muchos de nosotros hemos trabajado demasiado para hacer que las relaciones funcionen; algunas veces esas relaciones no tenían oportunidad porque la otra persona no estaba disponible o se rehusó a participar.
Para compensar la falta de disponibilidad de la otra persona trabajamos demasiado duro. Podemos haber hecho todo el trabajo o la mayor parte. Esto podrá enmascarar la situación por un rato, pero por lo general nos cansamos. Luego, cuando dejamos de hacer todo el trabajo, nos damos cuenta de que no hay relación, o ya estamos tan cansados que no nos importa.
Hacer uno todo el trabajo en una relación no es amar, dar o tener interés. Es una conducta autoderrotista y contraproducente para la relación. Crea la ilusión de una relación cuando de hecho puede no haber ninguna. Le permite a la otra persona ser irresponsable acerca de la parte que le toca. Como eso no satisface nuestras necesidades, finalmente nos sentimos victimados.
En nuestras mejores relaciones, todos tenemos periodos temporales en los que una persona participa más que la otra. Esto es normal. Pero cuando es una manera permanente de participar en las relaciones, nos deja sintiéndonos cansados, desgastados, necesitados y enojados.
Podemos aprender a participar en una cantidad razonable y luego dejar que la relación encuentre su propia vida. ¿Somos nosotros los que siempre llamamos? ¿Somos los que siempre iniciamos? ¿Somos los únicos que damos? ¿Somos el que hablamos de los sentimientos y se esfuerza por lograr la intimidad?. ¿Somos el único que espera, que tiene esperanzas, que trabaja?
Podemos dejarlo ir. Si la relación se va a dar, se dará y se convertirá en lo que estaba destinada a convertirse. No ayudamos a ese proceso tratando de controlarlo. No nos ayudamos a nosotros mismos, a la otra persona o a la relación tratando de forzarla o haciendo todo el trabajo.
Déjala estar. Espera y ve. Deja de preocuparte por hacer que ésta se dé. Ve qué sucede y esfuérzate en comprender si eso es lo que quieres.


“Hoy dejaré de hacer todo el trabajo en mis relaciones. Me daré a mí mismo y a la otra persona la facultad de exigir que ambos participemos. Aceptaré el nivel natural que alcancen mis relaciones cuando yo haga mi parte y le permita a la otra persona elegir la suya. Puedo confiar en que mis relaciones alcanzarán su propio nivel. Yo no tengo que hacer todo el trabajo; lo único que necesito es hacer la parte que me toca”.

I AM IN RECOVERY. 12 STEP

Un método para dejar la adicción que ha demostrado su eficacia en todos los países del mundo y con los mas diversos tipos de adicciones, ...