9 de Marzo
Las mujeres
que amamos demasiado a menudo nos decimos que el hombre con el que estamos
saliendo no ha sido nunca realmente amado, ni por sus padres ni por sus
anteriores esposas o novias. Lo vemos como una víctima, y prestamente nos
abocamos a la tarea de reparar todo lo que le ha faltado en la vida antes de
que nos conociera. Interpretamos su lejanía emocional, su malhumor o depresión,
su crueldad, su indiferencia, su violencia, deshonestidad o su adicción como
signos de que no ha sido lo suficientemente amado. Compadecemos a nuestro amor
por sus defectos, sus fracasos, incluso por sus patologías. Estamos decididas a
rescatarlo mediante el poder de nuestro amor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario