Cuidar de
uno mismo significa asumir la responsabilidad de nosotros mismos. Asumir
responsabilidad por nosotros mismos incluye asumir nuestras verdaderas
responsabilidades con los demás.
A veces,
cuando empezamos la recuperación, estamos hartos de sentirnos responsables de
tanta gente. Aprender que únicamente tenemos que ser responsables de nosotros
mismos puede ser un alivio tan grande que, durante un tiempo, desconocemos
nuestras responsabilidades hacia los demás.
La meta en
la recuperación es encontrar el equilibrio: nos hacemos responsables de
nosotros mismos e identificamos nuestras verdaderas responsabilidades hacia los
demás.
Esto puede
implicar una clasificación, especialmente si hemos funcionado durante años de
acuerdo con nociones distorsionadas acerca de nuestras responsabilidades hacia
los demás. Podemos ser responsables de una persona como amigo o como empleado;
de otra persona, como patrón o como cónyuge. Con cada persona tenemos ciertas
responsabilidades. Cuando atendamos a esas responsabilidades reales,
encontraremos equilibrio en nuestra vida.
También
estamos aprendiendo que aunque los demás no son responsables de nosotros, en
cierta manera tienen responsabilidades con nosotros.
Podemos
aprender a discernir nuestras verdaderas responsabilidades hacia nosotros
mismos y hacia los demás. Podemos permitirles a los demás que sean responsables
de ellos mismos y esperar que sean adecuadamente responsables hacia nosotros.
Necesitaremos ser amables con nosotros mismos mientras aprendemos.
“Hoy me
esforzare en pensar claramente acerca de mis responsabilidades reales hacia los
demás. Asumiré esas responsabilidades como parte del cuidar de mí mismo”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario